A partir del 1 de octubre, las cotizaciones a la seguridad social a cargo del empleador se reducirán en un 5%, lo que tendrá un impacto de 850 millones de leus en el presupuesto del estado, pero sin que esto aumente el déficit presupuestario, anunció el primer ministro Victor Ponta, cuenta el Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX).
Ponta explicó que la medida no cuenta con el apoyo del FMI, sino será asumida por el Gobierno. Ponta añadió que el gobierno tiene capacidad de cubrir el impacto negativo, debido a que ha gestionado bien el presupuesto e incluso ha registrado recaudaciones suplementarias y gastos más reducidos en 2014.
A su vez, la ministra de Finanzas, Ioana Petrescu, declaróque deberá respetarse el déficit acordado y que por ello se ha decidido que es más sabio aplicar esta medida a partir del 1 de octubre, para reducir el impacto negativo. La ministra añadió que los representantes del FMI volverán al país en noviembre cuando se planteará el presupuesto para 2014 y que el gobierno se compromete a que dicho
presupuesto cumpla el objetivo del déficit y mantenga este cambio también para el 2015.
La ministra no ha querido explicar por qué el Gobierno no considera “suspendido” el acuerdo con el FMI aunque los expertos del Fondo se han ido de Rumanía sin una carta de intenciones por parte del gobierno rumano. Esta situación ha pasado anteriormente y en ese caso el acuerdo se consideró “suspendido”, sin embargo Petrescu ha especificado solamente que el acuerdo sigue vigente.
En los acuerdos con las instituciones financieras internacionales, Rumanía se comprometió a que el déficit presupuestario no supere el 2,2% del PIB en 2014.
