"La UEFA y el Congreso de los Estados Unidos siguen de cerca lo que sucede hoy en materia de fútbol rumano", declaró Radu Ionid, director de la División de Archivos Internacional del Museo del Holocausto en Washington DC. El propietario del Steaua de Bucarest y las autoridades futbolísticas deben considerarse "advertidas".
La Coalición de Antidiscriminación de Rumania comunicó al primer ministro rumano, Victor Ponta, de que el presidente del Consejo Nacional de Lucha contra la Discriminación, Csaba Asztalos, fue atacado por la calle después de que su institución que conduce expresó su postura sobre los "problemas racistas registrados por los aficionados del Steaua".
Ionid manifestó a la televisión B1 TV que tienen inidicios que los seguidores del Steaua amenazaron verbalmente a Asztalos. "Seguimos con mucha atención lo que hace este equipo y las manifestaciones racistas y fascitas", dijo.
"Podemos asegurar que si le tocan un pelo a Asztalos, las consecuencias serán graves", prosiguió Ionid, quien aclaró que sabe que la UEFA y el Congreso de los Estados Unidos están vigilando la situación del fútbol rumano.
