Una grabación de un alcalde de Rumania en el que fuerza a su hija desnuda a retractarse de su comportamiento ha conmocionado a los rumanos, en un país donde el castigo corporal es ilegal, aunque sigue presente en las familias.
En el video, difundido este miércoles, aparece la joven de 14 años arrodillada en el suelo con la cara contra la pared, los brazos por encima de la cabeza, pidiéndole disculpas por no comportarse correctamente y prometiendo ser "buena" en el futuro. No estaba claro qué había hecho la joven para recibir este tipo de tratamiento.
El vídeo se hizo viral rápidamente, pero la red social de Youtube lo eliminó alegando que violaba las reglas.
Traian Ogâgău, alcalde del Partido Nacional Liberal (PNL) de la ciudad transilvana de Sângeorz-Băi, reveló que él mismo grabó la escena durante un viaje de esquí y se la envió a la madre de la niña de quien está separado.
El regidor se defendió asegurando que se trata de su vida privada y su derecho como padre a educar a la adolescente. Incluso, llegó a citar un versículo de la Biblia: "Los que escatiman la vara de la disciplina odian a sus hijos”.
Las autoridades judiciales y de derechos de los niños ya han abierto una investigación para clarificar el suceso. Pese a que la violencia doméstica se declaró ilegal en 2017, este tipo de maltrato continúa siendo relativamente común en Rumania.
Un estudio realizado en 2017 por la Agencia Nacional para la Igualdad de Oportunidades entre Mujeres y Hombres refleja que 4 de cada 10 personas tenían conocimiento de la violencia intrafamiliar y el 86% quería un castigo más severo por ello.
Esta polémica ha estallado antes de las elecciones locales que se celebrarán el próximo 27 de septiembre. En un comunicado de prensa, el PNL señaló que condena la violencia contra los niños, independientemente de su agresor. Y un representante de su partido afirmó que el alcalde fue expulsado de la formación en marzo de este año.
