Antes de que se iniciara el encuentro, los asistentes pudieron disfrutar del arte marcial brasileño de origen africano, Capoeira, así como gustar la caipiriña.
Al evento acudieron intrusos de países rivales como México, que juega directamente contra Brasil, Argentina, Holanda y España, aunque también de otros que no participan la máxima competición futbolística del mundo como Perú y Cuba.