Los aliados de la OTAN apoyan firmemente la integridad territorial y la independencia de Moldavia, señaló este miércoles el secretario general de la Alianza del Atlántico Norte, Jens Stoltenberg, en una rueda de prensa al término del primer día de la reunión de ministros de Exteriores de la OTAN en Bruselas, informó la organización noratlántica en su página web.

Jens StoltenbergFoto: Jan Van De Vel / defense.gov

"Me gustaría felicitar a la presidenta recién electa (Maia Sandu). Moldavia es un país socio de la OTAN. Espero conocerla en algún momento, porque, por supuesto, también apreciamos la cooperación con Moldavia como socio de nuestra Alianza", dijo Stoltenberg.

"Vemos cómo Rusia ha desplegado tropas violando los deseos de varios gobiernos vecinos, cómo Rusia ha anexionado ilegalmente Crimea, cómo continúa desestabilizando el este de Ucrania, cómo hay tropas rusas en regiones de Georgia y también cómo hay tropas en Moldavia, en Transnistria", prosiguió el jefe de la OTAN.

"Y esta violación de la integridad territorial de la República de Moldavia es otro ejemplo de cómo Rusia con demasiada frecuencia no respeta el derecho internacional y la integridad territorial de los países, incluida Moldavia", subrayó Stoltenberg.

Las declaraciones del secretario general de la OTAN se producen después de los ataques dialécticos por parte del Kremlin en los últimos días contra la presidenta electa de Moldavia, Maia Sandu, quien dijo que Rusia debe retirar el Grupo Operativo de Tropas Rusas (GOTR) de la región de Transdniéster y que la misión de mantenimiento de la paz debe ser reemplazada por una civil, con mandato internacional, bajo los auspicios de la OSCE y la ONU.

Según Radio Chisinau, Maia Sandu declaró el lunes que no existe un acuerdo firmado por la República de Moldavia que permita el estacionamiento de GOTR, heredero del XIV Ejército de la extinta Unión Soviética en la región de Transnistria, con el propósito de controlar más de 20.000 toneladas de municiones abandonadas tras la desintegración de la URRS.

Tras las afirmaciones de Sandu, desde el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, hasta el ministro de Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, advirtieron que la retirada de las "fuerzas de paz rusas" conducirá a la "desestabilización" en la región.

Varios analistas calificaron la reacción de Moscú a las declaraciones de Maia Sandu sobre Transnistria como "desproporcionada", lo que demuestra, en sus opiniones, que el Kremlin estaba “molesto” por lo que considera una derrota geopolítica en la República de Moldavia.

Asimismo, la falta de reacción del Ministerio de Exteriores e Integración Europea de Moldavia demuestra que el Gobierno del primer ministro Ion Chicu es minoritario y no cuenta con el apoyo de la mayoría de los votantes que escogieron a Maia Sandu.

GOTR, cuya misión oficial pasa por defender los viejos depósitos de armamento soviéticos en Transnistria, cuenta con alrededor de 1.500 soldados, mientras que la fuerza de paz rusa tiene unos 500 militares.