Expertos del sector inmobiliario declararon que, en mayo de 2014, el metro cuadrado en edificios nuevos en Chisinau, se vendía entre 400 y 600 euros, mientras que el precio en el mercado de segunda mano rondaba los 600 euros, informó el Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX), que cita a Oreanda World Econ.

Hay una diferencia significativa en el comportamiento de los vendedores: los ciudadanos, que venden sus propiedades, no se apresuran a bajar los precios. Además, el fraude y la quiebra de algunas empresas de construcción han reducido de manera significativa el nivel de confianza del público en el mercado de la vivienda nueva, y no se realizan muchas ventas sobre plano.

De acuerdo con la agencia Lara, a finales de 2013, el número de transacciones en la compra de apartamentos de primera y de segunda mano, era similar.