Se prevé que la producción de cereales de Rumania disminuya considerablemente este año debido a una sequía prolongada, pero el exportador del Mar Negro aún debería acumular un excedente suficiente para ofrecer en los mercados internacionales, señalaron este lunes agricultores y expertos.

Transport de cerealeFoto: autoline-eu.ro

Rumania, el segundo mayor vendedor de cereales de la Unión Europea, es junto con Francia y Rusia un importante exportador a Oriente Medio, siendo Egipto su principal comprador.

"Es un doble golpe. Somos testigos de un año muy malo para el trigo. La situación se asemeja a 2002 cuando las plantaciones se congelaron en invierno por la ausencia de nieve y, luego, de lluvias en primavera”, aseveró el ex ministro de Agricultura de Rumania, Petre Daea.

Daea aseguró a Reuters que los datos muestran que los cultivos de 10 de los 41 condados administrativos estaban dañados "hasta el 100%".

Rumania recolectó el pasado año una cosecha récord de trigo de aproximadamente 10 millones de toneladas de 2,1 millones de hectáreas. Este año, los agricultores y comerciantes prevén recoger entre 5 y 7,4 millones de toneladas.

Sin embargo, un cultivo más pequeño, en un contexto de sequedad excesiva, tendría un impacto beneficioso, al prevenir la aparición de la enfermedad del cornezuelo en el grano, un requisito clave en Egipto, afirman los expertos.

El consumo interno de Rumania oscila entre 2,5 y 3 millones de toneladas, dejando un excedente de exportación de 2 a 4,9 millones de toneladas.

El Gobierno, que aún no ha publicado una estimación oficial, sorprendió a los mercados el mes pasado al detener temporalmente las exportaciones de trigo durante una semana por temor a que los bloqueos mundiales de coronavirus pudieran conducir a una fiebre local para aumentar las reservas.

Laurentiu Baciu, un agricultor de una pequeña localidad en el este de Rumania, en la frontera con Moldavia, dijo que entre el 80 % y el 90% de sus campos de 650 hectáreas dedicadas al cultivo del trigo estaban dañados.

"Incluso si llueve, será demasiado tarde. Los agricultores prevén recolectar este año la mitad de la cosecha respecto al año anterior”, concluye Baciu.