Tras beneficiarse de menos de 3.000 millones de euros de los fondos estructurales de la UE en todo el periodo comprendido entre 2007 y 2011, Rumania consiguió utilizar alrededor de 1.000 millones de euros sólo en el primer trimestre de 2012, incrementando su porcentaje de absorción general hasta cerca del 20% de los 19.200 millones de euros disponibles.

Aunque la baja tendencia de absorción parece estar cambiando lentamente, Rumania sigue siendo el país más rezagado de la Europa del este: el sumamente ambicioso objetivo del gobierno, fijado en 3.500 millones de euros para todo el año, no se cumplirá pese a que la fuerte dinámica de absorción del primer semestre se mantenga durante el segundo semestre de 2012.

En un entorno económico volátil a nivel mundial, las infraestructuras y los proyectos de desarrollo regional respaldados por la UE supondrán unos motores de crecimiento cada vez más importantes, en una Rumania carente de recursos, y servirán para mejorar su potencial económico a largo plazo si dichos fondos se utilizan de un modo eficiente.

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, advirtió de que se tienen que tomar medidas urgentes para facilitar la absorción de fondos europeos.