El recibo del gas incrementará un 5% y un 10% para los hogares y las empresas, respectivamente, a partir del 15 de septiembre, mientras que la factura de la luz aumentará entre un 2% y un 3% solo para el consumo industrial desde el mes de septiembre.
El Gobierno rumano, del primer ministro socialdemócrata Victor Ponta, aprobó en junio la hoja de ruta de los precios de gas natural, en la que se especifica que las tarifas subirán de nuevo un 8% para las familias a partir del 1 de julio de 2013 y un 5% para las empresas desde diciembre.
"Se trata de una medida que pretende ajustar la tarifa del gas con el coste de suministro y distribución", escribe un borrador del plan de ajuste.
La correción tarifaria se realizará cada trimestre para ajustar el precio interno con el europeo de importación. La tarifa nacional ronda los 160 dólares por metro cuadrado (125 euros) y el precio de importación alcanza hasta los 480 dólares por metro cuadrado (376 euros), lo que significa que se producirá un fuerte impacto sobre el consumidor.
El anterior gobierno conservador aprobó en marzo el calendario de los precios de la energía eléctrica, en la que se desprende que el recibo de la luz subirá a partir del 1 de julio de 2013.
