El delantero de Ucrania, Taras Sterpanenko, casi le parte la nuca de una patada al moldavo Vilatie Bordian en en área de Moldavia y obtuvo la tarjeta roja más clara en lo que va del año. El seleccionado de Ucrania se llevó una victoria por 2-1 sobre Moldavia en su casa en la noche del martes y sigue de cerca, junto a Polonia, a Inglaterra y Montenegro.

Sin embargo, la victoria fue empañada por uno de los faltas más vergonzosas nunca antes vistas en un campo de fútbol profesional, cuando en el minuto 92 Taras Stepanenko en un alto vuelo al estilo Kung Fu atacó a un defensor de Moldavia, lo que inmediatamente provocó gritos de asombro en todo el estadio.

El árbitro danés Kenn Hansen no pudo obtener sacar su tarjeta lo suficientemente rápido, ante el asombro por lo impactante que fue la falta.