El Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha señalado este jueves en la ciudad de Iasi, en el noroeste de Rumania, que la crisis de refugiados causada por la invasión rusa en Ucrania es similar a la de Siria, motivo por el que ha lanzado un nuevo llamamiento a parar la guerra de manera inmediata.

Josep Borrell susține declarații de presă la Aeroportul din Iași, la întoarcerea din vizita efectuată la ChișinăuFoto: Agerpres

"Estas cifras, en comparación con las de la crisis migratoria de Siria en 2015 y 2016, son muy altas y están aumentando a un ritmo vertiginoso. Esta es la consecuencia de un brutal ataque de las fuerzas militares rusas contra Ucrania, que utilizan bombas termobáricas, bombas de vacío, prohibidas por la Convención de Ginebra. No pueden asaltar ciudades bombardeando objetivos civiles", declaró Borrell en el aeropuerto de Iasi, tras realizar una visita oficial de dos días a Moldavia, donde se reunió con la presidenta del país, Maia Sandu, para tratar la seguridad de la región.

"Es una buena oportunidad para hacer un nuevo llamamiento desde la comunidad internacional, cuyos representantes dijeron muy claramente ayer [por este miércoles] en la Asamblea General de la ONU que esta guerra debe acabar", prosiguió el jefe de la diplomacia comunitaria, quien pudo constatar el esfuerzo de las autoridades moldavas para ofrecer alojamiento, comida y enseres a los 120.000 refugiados ucranios que han cruzado a este país de la Europa del Este.

"Tendremos que lidiar con una situación difícil, pero la vamos a afrontar porque estamos unidos. El apoyo de la Unión Europea a los Estados miembros o no miembros, pero pacíficos, como la República de Moldavia, que está en medio de la situación, es lo más importante”, concluyó Borrell.