​El Gobierno rumano planea restringir el horario de terrazas e imponer el uso obligatorio de mascarillas como nuevas medidas destinadas a contener el alza de casos por coronavirus, informó este miércoles Reuters.

Terase in Vama VecheFoto: HotNews.ro / Victor Cozmei

El Comité Nacional de Situaciones de Emergencias aseguró en la noche del martes que pedirá a las autoridades que aprueben que las terrazas de los bares y los restaurantes cierren a las 23.00 horas y que las mascarillas sean obligatorias en lugares abarrotados.

"Estamos analizando si lo aplicamos en todo el país o en la playa; en Bucarest o en otras zonas", aseguró Ludovic Orban, primer ministro rumano, tras ser preguntado por el cierre de las terrazas.

El número de contagios por coronavirus en Rumania ha superado los 1.000 casos nuevos cada día durante la última semana, lo que eleva la cifra de personas infectadas a 47.053 desde que la pandemia llegó al país a finales de febrero. Desde entonces, unas 2.239 personas han fallecido por la covid-19.

Esta situación ha obligado a Rumanía, Estado miembro de la Unión Europea desde 2007, a extender el estado de alerta hasta mediados de agosto y a imponer la cuarentena a varias ciudades y pueblos.

Las mascarillas ya son obligatorias en el transporte público y en los espacios públicos interiores, pero el cumplimiento ha sido relativamente bajo, señalaron las autoridades.

El Comité Nacional de Situaciones de Emergencia también desearía una mejor aplicación de las pautas de distanciamiento social en los centros turísticos en la costa del Mar Negro en Rumania.

Un agujero legislativo que permitió salir a miles de personas contagiadas de los hospitales o no recibir tratamiento durante la mayor parte de julio es una de las causas del aumento contagios, pese a que este vacío normativo se resolvió con un nuevo proyecto de ley parlamentario.

Las autoridades también achacan al incremento de infectados a la relativa falta de cumplimiento de las reglas de distanciamiento social y el uso de mascarillas en espacios cerrados. A principios de esta semana, la Fiscalía inició una investigación sobre un hombre que viajó a la costa del Mar Negro desde un pueblo que se halla bajo cuarentena.

Por su parte, el ministro rumano de Salud, Nelu Tataru, afirmó este martes que el número de casos nuevos debería comenzar a disminuir dentro de dos o tres semanas si se cumplen las normas.