Al menos 16 de las antiguas plataformas industriales podrán convertirse en nuevos proyectos residenciales o comerciales en los próximos años. Los terrenos de la antigua Casa Radio, Explanada de B-dul Unirii y la plataforma de Ascensorul en Calea Giulesti podrían convertirse en el emplazamiento de futuros edificios de oficinas, residenciales o centros comerciales, siendo estas solo algunas de las más conocidas ubicaciones que aún no se han puesto en valor, explica Juan Morales en su blog Real State Romania.

Uzinele Timpuri Noi dupa demolareFoto: Observatorul Urban/Florin Balteanu

La compañía de consultoría inmobiliaria Knight Frank Romania dice que hay al menos 16 plataformas industriales que sumarían más de 300 hectáreas de terreno disponible en Bucarest, después de que otras 40 plataformas industriales hayan sido puestas en valor con proyectos inmobiliarios en los últimos 28 años.

En los emplazamientos que tienen la infraestructura y el transporte público asegurados como es el caso de Razoare o Bucurestii Noi, se estima que se conviertan en proyectos finalizados en los siguientes 5-7 años. Otras plataformas industriales tendrán ligados su futuro al crecimiento económico y al desarrollo de infraestructuras, pero se estiman que en 10-15 años se conviertan también en proyectos inmobiliarios. El potencial de absorción de Bucarest aun no esta preparado para dar salida a todos los emplazamientos existentes porque se necesitan inversiones mayores, como nos enseña el ejemplo de IMGB o Republica, donde se espera el desarrollo en varias fases, así que hablamos de periodos más largos de tiempo, puede que de hasta 15 años, según opina el director de la División de Terrenos de Knight Frank Romania.

Por otra parte, si las antiguas plataformas puestas en valor se han transformado, en varios casos, en centros comerciales, hipermarcados, las plataformas restantes en la mayoría de los casos tienen potencial estrictamente residencial, ya que están ubicadas en el sur o este de la capital.

Este tipo de emplazamientos por su naturaleza disponen de buenos accesos, se sitúan dentro de la ciudad y cuentan con superficies generosas, por lo que permiten que se desarrollen grandes proyectos. A diferencia de las ciudades del oeste de Europa, el régimen comunista permitió el desarrollo industrial en la ciudad y construyó las zonas residenciales alrededor de estas fábricas.

Ahora, que las viejas fábricas han quedado abandonadas, solo hay grandes parcelas de terreno, en algunos casos en zonas centrales que ofrecen la posibilidad de desarrollar grandes proyectos, como es el caso de Timpuri Noi Square, con oficinas y viviendas, o el centro comercial AFI Palace Cotroceni.