El actual Parlamento de Rumanía ha sido uno de los más ineficientes desde la caída del comunismo, plagado de investigaciones por corrupción y con una actividad débil, según expertos rumanos, informó Reuters.

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Calificado como uno de los países más corruptos de la Unión Europea, Rumanía celebrará elecciones parlamentarias el 11 de diciembre, pero 89 de los 588 legisladores elegidos en 2012 no han cumplido con sus mandatos, según el Instituto de Políticas y Bienes Públicos (IPP). La mayoría de esos 89 están siendo investigados por casos de corrupción o han sido condenados.

El sistema de justicia rumano está sujeto a un control especial de la Unión Europea, aunque los fiscales anticorrupción del país han sido elogiados por una serie de procesos contra ministros, legisladores, alcaldes y jueces corruptos.

El estudio del IPP ha mostrado que los legisladores rumanos habían presentado un total de 1.689 iniciativas legales entre 2012 y 2016, pero sólo el 14% de ellas se convirtieron en leyes. En cambio, el Gobierno presentó 870 proyectos de ley, de los cuales más del 80% fueron aprobados.

Los tecnócratas gobiernan Rumanía desde noviembre de 2015, cuando las masivas protestas callejeras hicieron que el gabinete de izquierdas tuviera que dimitir. Las encuestas muestran al Partido Socialdemócrata (PSD) como el próximo ganador de las elecciones parlamentarias que se celebran este mes, volviendo al poder después de un año de interrupción.