El presidente rumano Kalus Iohannis ha generado este jueves duras críticas por haber afirmado que Hacienda había aplicado demasiado rápido una decisión definitiva de la justicia contra un grupo de comunicación, cuyo propietario cumple una condena de 10 años de prisión por fraude.

Klaus Iohannis, ora 10Foto: USER UPLOADED

Elegido en diciembre de 2014 tras una campaña centrada en el respecto al Estado de Derecho y en la lucha contra la corrupción, Iohannis calificó de inapropiado si no discutable la actuación de Hacienda, después de haber mandado una orden de evacuación al grupo Intact, que cuenta con cinco canales de televisión.

“No se puede eliminar la libertad de expresión por un motivo administrativo banal”, dijo el miércoles Iohannis.

La actuación de Hacienda procede después de que la Corte de Apelación de Bucarest sentenciara en agosto de 2014 la expropiación de los bienes del propietario de Intact, Dan Voiculescu.

A lo largo del jueves, la cuenta de Facebook de Iohannis ha visto reducida el número de seguidores de hasta unas 20.000 personas, al grito de traidor y lamentando haberle votado en las presidenciales.

“¿Desde cuándo respetar la ley significa un abuso?”, exclama un votante del actual jefe de Estado.

Esta cuestión llegó a ser un asunto después de que el Parlamento llamara la presencia del primer ministro, Dan Ciolos, quien, por lo visto, ha solucionado ya los problemas sociales, de pobreza, para poder dedicarse a la infracciones de los magnates, que sí que incumplen la ley.

Por su parte, el Consejo Superior de Magistratura criticó que los políticos defendieran al grupo de comunicación acusándoles de socavar la independencia de la justicia, sobre todo su prestigio.