La llegada de Corina Cretu al cargo de comisaria de Política Regional ha sido la gran apuesta del primer ministro rumano, Victor Ponta, que ha tenido que soportar duras críticas de la oposición conservadora contra su candidatura a la Comisión Europea (CE), pública el diarioLa Vanguardiacitando a la agencia EFE.
Su postulación levantó recelos entre las formaciones políticas de centroderecha, hasta el punto de que sus líderes escribieron una carta al presidente de la CE, Jean Claude Juncker, para pedirle que la desestimara.
Economista de formación, la europarlamentaria fue nombrada el pasado julio vicepresidenta del Parlamento Europeo, donde ejerce de diputada del grupo socialdemócrata desde 2007.
En la actualidad también es vicepresidenta del Grupo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas del Partido Europeo y forma parte de la Presidencia del Partido de los Socialistas Europeos.
Cretu, que nació en Bucarest hace 47 años, coqueteó brevemente en la década de 1990 con el periodismo, publicando artículos en varios diarios.
En 1996 se convirtió en consejera y portavoz de la Presidencia bajo el mandato de Ion Iliescu, primer presidente elegido democráticamente tras la caída de la dictadura comunista.
Ese año se afilió al Partido Socialdemócrata, en el que ejerció como jefa de Prensa y vicepresidente de la Organización Nacional de la Mujer.
La eurodiputada regresó en 2000 a su cargo de consejera y portavoz de Iliescu.
En 2004 fue elegida senadora, cargo que abandonó tres años más tarde para marcharse al Parlamento Europeo.
En las pasados comicios europeos, Cretu encabezó la lista de una alianza de centro izquierda y obtuvo su tercer mandato como eurodiputada.
Corina Cretu se casó hace dos años con el empresario Ovidiu Rogoz.
