Bucarest pierde dinero pero obtiene una mejor financiación que aumentará la absorción de fondos europeos.
En cierta medida, el primer ministro rumano, Victor Ponta, tiene razón al subrayar que Rumanía ha perdido dinero tras aprobar los presupuestos de la Unión Europea, cuando el presidente Traian Basescu aceptó la asignación de 39.000 millones de euros durante el periodo 2014-2020, en lugar de los 48.000 millones propuestos inicialmente.
Sin embargo, Rumanía ha obtenido una victoria: El Gobierno recuperará el IVA del dinero de los fondos europeos. Por ejemplo, un proyecto de 100.000 euros con fondos europeos tenía que pagar un 24% del IVA, cantidad que asume el Ministerio de Finanzas. Es decir, el ganador del proyecto europeo se lleva 72.000 euros de Bruselas y el resto, los 24.000 euros los pide al Ministerio de Finanzas. Pese al retraso de la institución pública, esa suma deberá ser desembolsada.
De esta manera, el Estado pierde dinero ya que la UE no devuelve el IVA como hace el Ministerio de Finanzas. Con el nuevo presupuesto, Rumanía ha logrado una victoria importante puesto que el Estado podrá solicitar el IVA a Bruselas, un privilegio por el que Bucarest lleva luchando desde hace un año y que muy pocos países lo tienen.
Así, Bucarest mejora su manera de financiación y conseguirá que se incremente la absorción de los fondos europeos, un mal que aún persiste. Por su parte, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, aceptó ayudar a Rumanía respecto al asesoramiento de proyectos europeos.
