Rumanía y Perú tienen muchas cosas en común para mirar con optimismo hacia el futuro de las relaciones bilaterales, sobre todo en el campo económico, explica Stefan Nicolae Encargado de negocios A.I. en el diario El Peruano.

Es importante destacar el espíritu totalmente positivo en estas relaciones y también la existencia de muchas semejanzas entre los dos pueblos: tenemos lenguas de la misma raíz latina, una historia en la que compartimos el deseo siempre expresado por la independencia y libertad, tradiciones culturales y costumbres muy ricas. Además, tenemos una larga historia de una muy buena y permanente cooperación diplomática en los organismos internacionales.

Y no por último, estamos muy involucrados en construir un futuro democrático y de bienestar para los dos pueblos. Por otro lado, quiero subrayar que la situación actual de los intercambios bilaterales está bastante lejos del potencial que ofrecen las economías de los dos países. Esta situación tiene sus razones objetivas: la transición, después de la caída del comunismo, ha impuesto focalizar la atención de las autoridades de Rumanía en desarrollar más las relaciones con países de la Unión Europea, organismo del cual mi país es miembro desde 2007. Pero en los últimos años redescubrimos algunos de nuestros socios tradicionales y uno de estos es el Perú.

Constatamos con satisfacción que la economía peruana pasa por un muy buen momento, con ritmos de crecimiento envidiables, a pesar de la actual crisis económica internacional. Otro argumento, en el sentido de que se puede mirar con convencimiento hacia el futuro, es el nuevo Tratado de Libre Comercio (TLC) que va a entrar en vigor en febrero de este año.

Según la opinión de los especialistas, el TLC es un acuerdo integral que abarca no solo temas de aranceles, sino también aspectos importantes como las inversiones, la propiedad intelectual, competitividad e innovación, temas medioambientales, etcétera. Lo que va a ganar el Perú es notable, ya que accede a un amplio mercado de cerca 500 millones de consumidores. Evidentemente para los países de la UE también es importante impulsar esta relación, así que hay que sacar el mejor provecho a este acuerdo.

En este marco más amplio, Rumanía puede ser uno de los socios europeos dinámico y activo, pues las economías de nuestros países son complementarias en muchos aspectos. La reciente creación de la Cámara de Comercio Peruano-Rumana, la visita de una delegación de importantes empresarios rumanos en octubre de 2012 (y los proyectos que ya se están analizando en estos momentos), la participación recíproca de las empresas en las ferias comerciales que se organizan en cada país son algunas de las herramientas a disposición para que el deseo de una relación más rica en logros se cumpla cuanto antes en las mejores condiciones.