El presidente de Rumania, Traian Basescu, sostuvo una discurso antes del inicio del Consejo Europeo, en el que se decidirá el presupuesto de la Unión Europeo durante el periodo de 2014-2020. "Se dice que tengo deudas de aquellos que me han apoyado durante el verano, se trata de una desinformación estúpida", afirmó el jefe de Estado.
Algunas declaraciones de Basescu:
Respecto a la política de cohesión, seguro que se han hecho propuestas ligadas a la penalización de Rumania. Ellas no se encuentran en los reglamentos de la UE: sólo aceptamos estar en el reglamento.
hay otros aspectos importantes como la cofinanciación, que se halla ahora en el 85%. Yo logré atraer un 10% más, por lo que hemos conseguido el 95% hasta ahora. Hay Estados que piden el 75%.
En cuanto a la prefinanciación, son Estados que piden un 2% para Rumania, yo he obtenido hasta el 9%. Tiene que ser negociado, yo he aludido a la crisis.
La propuesta de la Comisión pasa por una asignación de 1,08% del PIB de la UE (1.033..000 millones de euros), de lo que son las contribuciones de los Estados miembros y ingresos de los impuestos, entre otros.
El presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, ha tomado la iniciativa de un presupuesto reduciendo unos 80.000 millones de euros. Hay países donadores que quieren entre 100.000 y 200.000 millones de euros.
El interés de Rumania pasa por negociar el presupuesto de 2014-2020.
Si partimos con la idea de veto y lo anunciamos, estamos fuera de las negociacioens.
Estamos fuera de las negociaciones, no nos busca nadie y luego ver si asumimos el veto. No estamos solos en la búsqueda de aliados y otros también necesitan nuestro apoyo.
Rumania, que es el 7º país más grande de Europa, tiene capacidad de negociar. Apoyo la negociación, no el veto.
Espero que aquellos que piden una reducción de 200.000 millones de euros tengan como objetivo alcanzar un compromiso que nos una después de este Consejo.
Habrían Estados donadores que se alegrarían de ver a un Estado beneficiario utilizando el derecho a veto y que no se llegue a un compromiso.
Solamente he utilizado el veto una vez ante el Consejo de Asuntos Generales (CAG) por el tema de Serbia y puedo asegurar que no fue una experiencia agradable, lo puede contar Cristian Diaconescu, quien se despertó con 26 países en su contra.
Consideraría que no cumpliría con las atribuciones constitucionales si fuera delegado de las tareas por parte del premier
Sé lo que puedo hacer desde el punto de vista de la capacidad de negociación en el Consejo y sé que tengo más potencial que Ponta.
No se puede acudir con la idea de veto si se quiere ser responsable, sobre todo en una posición de Estado de beneficiario.
Me sería de ayuda inesperada desde el punto de vista político si el Parlamento resolviera los siguientes problemas de credibilidad: Trasculescu (quien presentó su dimisión este martes), incompatibilidad de Mircea Diaconu y la Cámara de los Diputados con dos ministros que tienen un expediente penal.
También sería útil si el Gobierno envía las respuestas a las peticiones de la Comisión con respecto a la competitividad, desarrollo regional y transportes porque aún no se han mandado.
Se dice que tengo deudas de aquellos que me han apoyado durante el verano, se trata de una desinformación estúpida.
No tengo ninguna deuda ante nadie, sino a aquellos que han apoyado a Rumania como Estado de derecho, no a Traian Basescu.
Mi única obligación pasa por defender los intereses de Rumania,
Más convergencia, más integración. Todavía no tenemos documentos que apoyen este proceso, pero querría ver al menos un poco de convergencia en el presupuesto. Y no sólo para Rumania sino para otros Estados que desearían que este proceso político se inicie con este presupuesto.
No estoy muy lejos del momento en el que decidiré defenderme.
