A lo largo del mes de octubre se han producido varios incidentes en los que han estado implicados ciudadanos rusos: un accidente de tráfico provocado por un empleado de la Embajada, un robo de documentos económicos secretos y el rechazo de un diplomático a realizar el control de alcoholemia. Al mismo tiempo, en la complicada relación República Moldavia-Transnistria-Rusia se han sucedido otros acontecimientos con consecuencias que se anuncian graves. Por ahora, no existen informaciones que muestren sus vínculos entre ambos asuntos, pero su sucesión rápida indica una febrilidad de los actores principales.

Tres ciudadanos rusos implicados en incidentes en Bucarest

Viernes, 19 de octubre: Un ciudadano ruso, identificado por la Dirección de Investigación contra el Crimen Organizado (DIICOT), con iniciales M.O, fue interrogado por fiscales, con la ayuda del Servicio Rumano de Inteligencia (SRI) en el aeropuerto Henri Coanda, cuando intentaba marcharse del país con documentos y mapas geológicos de las minas de cobre y metal en las explotaciones Moldova Noua y Suvorov.

Sábado, 20 de octubre: Otro diplomático ruso, tercer secretario de la Embajada de Rusia en Bucarest, fue parado en Snagov por un control de tráfico. El diplomático, que conducía un coche el cuerpo diplomático, rechazó la prueba de alcoholemia y, ahora mismo, está siendo investigado por los fiscales.

Domingo, 21 de octubre: El primer secretario de la Embajada de Rusia en Bucarest atropelló a una joven en un cruce de peatones en la capital rumana. La mujer se encuentra en estado crítico. El diplomático, que beneficia de inmunidad diplomática. también rehusó el control de alcoholemia y las pruebas biológicas. Bucarest ha pedido que se levante su inmunidad pero Moscú lo ha rechazado y facilitó la salida del diplomático fuera del territorio rumano. Este problema puede tener graves consecuencias después de que miembros de la coalición gubernamental Unión Social Liberal presentara a Rusia como una alternativa a las tensas relaciones de Rumania con la Unión Europea y Estados Unidos.

Estos tres incidentes parecen no tener ninguna vinculación. Si el accidente de tráfico se pudo producir por casualidad, los otros dos están acusados de espionaje económico. Lo que sí está claro que dan una imagen negativa de Rusia en el país. La reacción por parte de Bucarest ha sido enérgica, lo que puede acrecentar una mayor tensión con Moscú.

Acontecimientos en Transnistria:

Miércoles, 17 de octubre: El ministro de Defensa de la República de Moldavia declaró a Publika TV que Rusia suministra a la región separatista de Transnistria no sólo camiones militares sino armamento. Según el responsable de esta cartera, no se necesita equipamiento militar en el marco de una misión de mantenimiento de paz. Además, se mostró preocupado por los trabajos de modernización del aeropuerto de Tiraspol -también para Bucarest. Se trata de una provocación por parte rusa hacia Rumania.

Viernes, 19 de octubre: CEDO condenó a la Federación de Rusia por haber infrigido el derecho a la educación de unos ciudadanos que estudian en escuelas la grafía latina en Transnistria. La Corte de los Derechos del Hombre obliga a Moscú a pagar más de un millón de euros a los denunciantes. Se trata de una decisión simbólica que moleta mucho tanto al régimen separatista de Tiraspol como a Moscú.

Miércoles, 24 de octubre: Nezavisimaya Gazeta, citada por Unimedia, publica un acuerdo secreto entre Moscú y Tiraspol que se basa en el principio "se retira un helicóptero, se traen otros dos". Si la información resulta real, significa que la operación de Rusia de retirar una parte de su armamento de Transnistria es una pantomima.

¿Por qué la república separatista de Transnistria es tan importante?

Desde el punto de vista de Rumania, resolver el conflicto congelado del territorio de la República de Moldavia es esencial para continuar el camino europeo de Chisinau, ya que la UE no puede aceptar la candidatura de un Estado con problemas territoriales.

Sin embargo, Rusia pretende mantener en jaque a Moldavia y sus aspiraciones prooccidentales, además de mantener a sus tropas en la puerta de los balcanes, cerca de occidente. Moscú discute sobre la implantación de escudos antimisiles en Transnistria como respuesta a la instalación estadounidense en Rumania y Polonia.

Además, esta zona representa un interés de negociación con Alemania, que han entrado en la esfera del conflicto desde que el pasado 22 de agosto se desplazara a Moldavia la canciller alemana, Angela Merkel.