Sofía presentó una queja a la Comisión Europea por el retraso de Bucarest respecto a la apertura del puente Vidin-Calafat. La demora en la parte rumana impide la constitución de la compañía que tiene que gestionar el paso fronterizo, declaró el ministro búlgaro de Transportes, Ivailo Moskovski, mientras que Rumania considera estas declaraciones como presión para decidir la sede de la empresa.

Podul Vidin-Calafat peste Dunare (septembrie 2012)Foto: DanubeBridge2.com

"He tratado varias veces en vano organizar una reunión. He enviado varias peticiones pero, por el momento, la única respuesta rumana es que no tiene permiso para debatir sobre este tema", aclaró Moskovski, citado por la agencia estatal búlgara BTA, citado por Radio Rumania Actualidad.

"Sinceramente lamentaré si llegamos a la situación de que el puente esté terminado y no tengamos una empresa que se encargue de su gestión. He propuesto tres opciones y ya he comunicado a la Comisión Europea del problema", prosiguió el ministro.

Hasta ahora, se ha ejecutado un 86% de los trabajos, quedando por montar un elemento de 18 metros. Desde la primera semana de noviembre, se podrá cruzar a pie.

Por su parte, el Ministerio de Transportes rumano considera que la queja de las autoridades vecinas son injustificadas.

El secretario de Estado, Septimiu Buzasu, asegura que los trabajos de la parte rumana se acabaron hace un año y medio y que la sociedad común de la plataforma se creará después de que se abra al tráfico.

"Hemos preparado los documentos necesarios. El problema radica en que ambas partes no han fijado dónde estará la sede de la empresa, en Rumania o Bulgaria, y tampoco han establecido el modo de distribuir las ganancias", explica Buzasu.

"Las discusiones que hemos tenido anteriormente con Sofia no han sido fructíferas, ya que su postura ha sido inflexible. Rumania no tendría los beneficios que desea, mientras que reclaman que la sede se sitúe en Bulgaria.", precisó Buzasu.

El puente Vidin-Calafat será el segundo puente que una a Rumania y Bulgaria. Por ahora, solamente existe el paso fronterizo de Giurgiu-Ruse.