Los pagos informales a los medios, denominado tecnócrata de los sobres - soborno de los hospitales- no son un fenómeno sólo de Rumanía, ya que todos los sistemas sanitarios de la región, herederas de las antiguas tradiciones soviéticas, no son capaces de asegurar al paciente a los tratamientos que debería ser universales.

Harta spagilor in spitaleFoto: Hotnews

Los sobres perjudican a la Sanidad, dicen la mayoría de los estudios publicados al respecto.

Su existencia impide una mejor eficiencia de los servicios médicos, bloqueando las tentativas de reducción del precio de unos tratamientos que podrían ser más baratos.

En Rumanía, el 11 por ciento de los adultos cree que es obligatorio ofrecer un sobre.

La diferencia entre un rumano y el resto de los ciudadanos de la región se halla en que la mayoría de los sobres es una señala de gratitud hacia el médico.

Sin embargo, esta gratitud resulta caro: los rumanos son los europeos que piden prestado dinero con más frecuencia para cubrir los gastos sanitarios, que teóricamente están asegurados.

Uno de cada cuatro significa el 10% de sus ingresos anuales.

Los pacientes rumanos con cáncer o con diabetes han declarado que no le han pedido dinero pero que siente la responsabilidad de ofrecer un sobre al personal sanitario para ser mejor atendidos.

Los enfermos rumanos suelen acudir a una clínica privada antes que a un hospital público.

La suma media de un sobre en Rumanía en 2013 ronda los 34 lei en el medico de cabecera; 360 lei, en los hospitales (un 70 % para el doctor y el resto para los asistentes); 1130 lei, en la secciones de quirurgía.

En el caso de las operaciones y los nacimientos se trata de un fenómeno universal, sobre todo cuando el médico es una celebridad en el campo.

Un 37 % de los sobres contienen dinero mientras que entre los regales se encuentran café, bebidas alcohólicas, tabaco,...

Los rumanos piensan que se trata de una acto de corrupción pero siguen haciéndolo porque se beneficiarán de un mejor tratamiento.

Los pagos informales en Rumanía se eleva al 6,3 % del total de los gastos de la Sanidad.

Los estudios publicados exigen medidas gubernamentales para disminuir este fenómeno.

En Moldavia, la existencia de los sobres está generalizada. En los casos de cáncer se oscila entre 500 y 1000 euros. Para la quimioterapia, entre 200 y 300 euros.

El 70 % de los ucranios deben ofrecer un sobre para recibir una atención sanitaria. Muchos no se hospitalizan para pagar menos al centro de salud.

En Kosovo, los sobres están extendidos: a veces hay que acudir al hospital con las sábanas.

La introducción del copago en Bulgaria ha reducido el número de sobres.

En Serbia, está menos extendido, aunque en algunos casos se llega a los 200 euros.

Los croatas, por su parte, sufren una falta de medicamentos como en Rumanía, por eso muchos tienen que pagar el tratamiento.

En Hungría, el 46 % de los pacientes aseguran que pagan de su bolsillo por la hospitalización. El gasto sanitario representa el 2 %.

Los polacos han cambiado considerablemente su punto de vista y se muestran contrarios al sobre.

En Montenegro, los pagos informales no están extendidos, mientras que Turquía ha visto cómo sus médicos han pasado de cobrar 1200 dólares a 4900 dólares, lo que ha reducido el soborno.

La información proviene de los siguientes estudios:

* The performance of public health-care systems in south-east Europe. Friedrich-Ebert Stiftung Romania. June 2014.

* The inability to pay for health services in Central and Eastern Europe.European Journal of Public Health. September 2013.

* Informal payments: from gratitude to corruption. Center for Policy Studies, Central European University. February 2013.

* Informal payments in developing and transition countries. International Policy Centre/World Bank. June 2010.