La producción de madera aserrada en Rumanía ascendió en 2013 a 5 millones de metros cúbicos, con respecto a los 1,4 millones de metros cúbicos registrados en 2000., informó el Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX).

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Schweighofer, Kronospan y Egger, las tres empresas austriacas que controlan el procesado de madera en Rumanía, compran madera de Romsilva y de otros propietarios de bosques y fabrican madera aserrada, tableros de aglomerado (PAL) y otras placas a las que venden a los productores de mobiliario o exportan. Estas tres empresas tienen un control tan significativo del mercado que incluso se les acusó de controlar los precios en 2005.

Las exportaciones de madera aserrada, que se produce a un nivel de procesado tres veces superior al del tronco, totalizaron unos 670 millones de euros en los primeros 11 meses del 2013. El mobiliario, que se produce a un nivel de procesado al menos 20 veces superior al del tronco, generó unas exportaciones de 1.500 millones de euros en los primeros 11 meses de 2013.

Un informe del Tribunal de Cuentas rumano indica que en Rumanía se explotan a diario un promedio de 41 hectáreas de bosque, gran parte de los cuales son deforestaciones ilegales y robos de los bosques del estado. En estas condiciones, en el periodo 1990-2011 se cortaron de forma ilegal más de 80 millones de metros cúbicos de madera (lo que correspondería a una superficie de 366.000 de hectáreas) que podrían evaluarse en más de 5.000 millones de euros (calculados por un precio mínimo de 70 euros el metro cúbico, según el Tribunal de Cuentas)