Dos juezas rumanas fueron arrestados hoy por presunto tráfico de influencias y corrupción al haber recibido decenas de miles de euros a cambio de ayudar a expedientes penales de varios acusados, anunció el Departamento de Anticorrupción (DNA). Las magistradas Viorica Dinu y Antonela Costache del Tribunal de Bucarest pasaron a arresto preventivo de 29 días después de que aparecieran claras sospechas de haber exigido una cantidad de 150.000 euros comprometiéndose a conseguir decisiones favorables para la libertad de un empresario Dinel Nitu, que esta siendo juzgado por fraude en la compañía estatal de gas, Transgraz.

Ambas juezas tomaron 55.000 euros de soborno pero esta suma la devolvieron por no haber resuelto el expediente penal. Dinu y Costache también están bajo sospecha de haber recibido alrededor de 44.000 euros para intervenir otros casos penales, señaló Anticorrupcion. Un secretario del Tribunal de Bucarest y dos abogados también están siendo investigados.

De esta manera, Romanía demuestra su compromiso de luchar contra la corrupción ante Bruselas que observa atentamente las reformas del sistema judicial. En 2012, otros dos jueces de la Alta Corte de Justicia y Casación de Romanía fueron condenados a penas de prisión por corrupción.