Rumanía ya tiene un nuevo Gobierno, el tercero desde hace casi dos años, después de que el Parlamento respaldara hoy con 346 votos a favor y 192 en contra el Ejecutivo del primer ministro Victor Ponta, pero falta que firme el decreto el presidente Traian Basescu. "Deseo que el Gobierno empiece a trabajar a partir de mañana mismo", afirmó Ponta tras conocer el resultado de la votación de confianza.

Victor Ponta la Antena 3Foto: Captura Antena 3

Horas antes, el presidente Basescu amenazó con bloquear la decisión del Parlamento ante el Tribunal Constitucional al alegar que Ponta no respeta el voto de las elecciones legislativas de diciembre de 2012: “Si el primer ministro no se asume un nuevo programa, no tendremos Gobierno hoy”.

En cambio, Ponta espera que Basescu firme el decreto respecto a la composición del nuevo Gobierno a lo largo de la tarde.

Con un equipo joven y muchas caras nuevas, como la flamante ministra de Finanzas Ioana Petrescu, con tan sólo 34 años, Ponta se vio obligado a formar un nuevo Gabinete después de que los liberales, principales socios de la Unión Social Liberal, se retiraran de la coalición gubernamental la semana pasada.

Tras un intenso intercambio de diatribas entre los parlamentarios, el Partido Demócrata Liberal (PDL), del conservador presidente Traian Basescu, y el Partido Nacional Liberal (PNL) votaron contra la nueva composición del Ejecutivo.

El presidente del PNL, Crin Antonescu, señaló que la decisión de su formación se debe a que “se trata de un Gobierno ilegítimo desde el punto de vista electoral y político”, aunque reconoció la legalidad de la investidura.

Antonescu, sin embargo, arremetió contra Ponta a quien le pidió la dimisión reiteradamente y se posicionó ahora como principal líder de la oposición.

Pese a que gozan de una mayoría simple los socialdemócratas, junto a sus aliados conservadores y progresistas, el jefe del Gobierno prefirió aunar fuerzas políticas con la Unión Democrática Magiar de Rumanía (UDMR), partido minoritario húngaro, y los representantes de las otras 17 minorías.

En la extinta coalición, los liberales gestionaban 10 de 27 ministerios, mientras que el nuevo Gobierno contará con 25 ministerios y ministerios delegados.

La minoría húngara, por su parte, obtuvo los ministerios de Cultura y Medio Ambiente, mientras que la ex campeona olímpica de 5.000 metros en los Juegos Olímpicos de Sidney, Gabriela Szabo, se encargará de dirigir la cartera de Deportes.

El nuevo jefe del Gobierno se ha comprometido también a continuar la política de ajuste para reducir el déficit público y la reforma económica acordadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio de un préstamo preventivo de 4.000 millones de euros.

"Mantendremos los impuestos en un 16 % y negociaremos con el FMI la gravación de ingresos que se reinviertan y la reducción de las contribuciones de la seguridad social", precisó Ponta.