​La oposición comunista de Moldavia demandó hoy elecciones generales anticipadas para superar la crisis de gobierno provocada por la decisión del Partido Liberal Democrático (PLD) de abandonar la coalición oficialista, informa el diariovasco.com.

"A comienzos de 2013 estalló una gravísima crisis en el Gobierno moldavo y escándalos de corrupción en la oficialista Alianza por la Integración Europea (AIE) que confirmaron los peores presagios", señala el comunicado del Partido de los Comunistas de Moldavia (PCM).

Los comunistas, que gobernaron Moldavia entre 2001 y 2009, aseguran que la AIE agoniza y que el país está ahora bajo el control de grupos criminales, según las agencias locales.

"El único desenlace optimista de este serial criminal trienal sería únicamente la dimisión de toda la Alianza y la inmediata celebración de elecciones libres, limpias y democráticas", apunta la nota oficial.

En caso de que las autoridades desoigan sus demandas, los comunistas advierten que llamarán a la población a exigir en las calles la "capitulación política" de la AIE.

"No hay duda alguna que este llamamiento será escuchado por la mayoría de la población", agrega.

El primer ministro moldavo, Vlad Filat, líder del PLD, llamó el pasado 13 de febrero a revisar la coalición de gobierno, aunque se opuso categóricamente a convocar elecciones extraordinarias.

Además, pidió a los otros dos socios de gobierno, el Partido Democrático (PD) y el PLD, que empiecen "con urgencia las negociaciones para un nuevo acuerdo de coalición".

Filat acusó a los compañeros de coalición de intentar convertir la AIE en un politburó del Partido Comunista de la Unión Soviética y de promover los programas de sus formaciones políticas, en vez de trabajar por el bien del pueblo.

El anuncio de Filat se produjo inmediatamente después de que el Comité Nacional Anticorrupción (CNA) incoara tres casos penales por corrupción contra los ministros de Finanzas, Sanidad y Cultura, todos miembros del PLD.

Filat acusa al Partido Democrático, del que depende el CNA y la Fiscalía general, de ordenar la persecución judicial de los ministros por motivos políticos.

Según la prensa, el PD se habría vengado así de Filat, quien habría demandado la dimisión del fiscal y de otros altos funcionarios y miembros de esa formación implicados en la muerte en diciembre de un empresario durante una cacería.

Moldavia ya tuvo que disolver el Parlamento y convocar comicios generales extraordinarios en 2009 y 2010, ante la incapacidad de los diputados de ponerse de acuerdo en la designación de un presidente.