El Parlamento de Rumania aprobó este miércoles una ley que limita el embargo de los bancos a la gente que incumple con los pagos de su hipoteca. Con 207 votos a favor y uno en contra, los parlamentarios han autorizado a los bancos confiscar la propiedad para la cual se pidió el préstamo por hasta un valor de 250.000 euros, pero les prohíbe confiscar otros bienes o exigir pagos en el futuro.

También se aplicará a aquellos que actualmente cuentan con propiedades recuperadas por los bancos.

En un principio los legisladores aprobaron una ley similar el 25 de noviembre, pero el presidente Klaus Iohannis la reenvió al Parlamento.

Esta propuesta podrá ayudar a miles de personas con problemas en sus créditos que adquirieron sus viviendas en pleno auge económico.

Por su parte, el Banco Central de Rumanía ha dicho que esta medida podría generar desequilibrios financieros, mientras que los bancos creen que los préstamos se encarecerán.