Los bancos rumanos desaceleraron el proceso de saneamiento de sus balances a finales del año pasado, con el volumen de préstamos morosos estancado en un 15,3% sobre el total de préstamos a fecha de octubre de 2014, según datos del Banco Nacional de Rumanía. De esta forma, el ratio de morosidad registra un descenso de 5 puntos porcentuales respecto al pico alcanzado en Abril del mismo año, publica el Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX), que recoge una noticia de Ziarul Financiar.
Pese a todo, la banca aún debe librarse de préstamos tóxicos por un valor aproximado de 13.000 millones de euros, según estimaciones de PwC, lo que sitúa al sistema financiero del país en el quinto puesto de la región Central y Oriental de Europa en cuanto a volumen de préstamos de dudoso cobro. Respecto a la tasa de morosidad, Rumanía ocupa el primer lugar.
La mejoría en el ratio de morosidad ha sido provocada por el proceso de saneamiento contable impulsado por el BNR, con objeto potenciar el acceso al crédito en el país.
