Una importante institución de Timisoara me ha solicitado mi opinión sobre varios puntos ligados al desarrollo futuro de esta ciudad. Agradezco el interés que puedan tener en lo que pienso y me honra la oportunidad que me ofrecen. Consideran que el punto de vista de un extranjero, afincado en ella y claramente comprometido con la misma, puede aportar una visión complementaria, por diversa, a la de los habitantes de toda la vida.

José Miguel ViñalsFoto: Hotnews

Muchas de las opiniones que les he trasladado las he comentado en diversos artículos pero el hecho de ponerlas todas juntas me permite mostrar una visión de conjunto sobre mis ideas para esta ciudad.

Mi relación con Timisoara fue amor a primera vista. Todo el mundo que me conoce sabe que adoro esta ciudad y que confío mucho en su futuro, en sus habitantes, en sus gobernantes, en su fuerza creativa… si se hacen las cosas bien, y que si no, no pasará de ser un centro urbano de segunda clase en el conjunto europeo.

Pero sería una verdadera pena, hay muchos argumentos para subrayar el potencial que presenta.

No voy a copiar aquí el informe que he hecho, pero sí aglutinar aquellos puntos que me parecen de mayor interés y que puedo compartir.

¿Qué debería ser Timisoara en el futuro cercano?

1. Entre Bucarest y Budapest hay sitio para una gran ciudad. Timisoara debería ser ésta. De hecho, sería más justo decir una ciudad media, es decir, con una población de entre 500.000 y 750.000 habitantes. A largo plazo se debería expandir mucho más, pero alcanzar los 500.000 habitantes es ya todo un reto. ¿Por qué estoy tan seguro? Esta fotografía permite tener una idea:

Timisoara casi está en el centro del triángulo formado por 3 capitales. Se podría decir que es el baricentro del mismo, y en física el baricentro es el punto de concentración de la masa del cuerpo estudiado. No, no me voy por las ramas, por no utilizar otra expresión más pintoresca. La distancia desde Timisoara a Budapest, Belgrado y Bucarest es en teoría, óptima. Una gran ciudad en medio de tres grandes capitales, nodo de comunicación entre ellas tres. ¿Hay alguna otra que pudiese ocupar este puesto? Al este los Carpatos lo impiden. Al oeste, en Rumanía sólo Arad, pero de esto hablaré más abajo. En Hungría Szeged, si bien lo tiene más difícil, principalmente por la lengua, difícil para el extranjero, aunque no hay que desestimar la enorme valía de los húngaros en superar grandes retos. Serbia debería potenciar sin duda Novi Sad, aunque el no ser miembro UE es un freno importante actual. Dado que actualmente nos gusta a todos mucho la simplificación gráfica, este diseño mío explica muy bien mi planteamiento y tiene una poderosa carga visual:

Bucarest, Budapest, Belgrado, Timisoarad

2. Centro logístico y productivo del Sudeste europeo. Desde esta ciudad se llega fácilmente a un gran número de países y tal como demostré en una entrada anterior, estos suman un total de 210.000.000 de consumidores potenciales. Viendo el siguiente mapa se entiende lo que indico. Timisoara (¿Timisoarad? Ver el punto H de más abajo) es el pequeño punto negro, centro de un largo conjunto de países europeos que mostrarán un muy buen crecimiento en los próximos años. Para más información al respecto leerhttp://rumaniaempresarial.wordpress.com/2013/10/19/timisoara-epicentro-de-210-000-000-de-consumidores/

3. Centro cultural: Igual que Toledo fue, en el S. XII, el centro europeo de mayor peso cultural y el rey Alfonso VII Emperador de las 3 religiones (cristianos, judíos y musulmanes), Timisoara podría, dada la presencia histórica de una rica (en sentido real y figurado) comunidad húngara, serbia, alemana, judía, búlgara, ucraniana y rumana, ser un centro cultural de primer orden aunando la creatividad de todas estas nacionalidades en un ambiente de gran frenesí. La candidatura de Timisoara a Capital Cultural Europea en 2021 (también Arad compite,…. ¿les aburro si repito que Timisoarad tendría muy buenas posibilidades?). No hay ningún riesgo de dispersión nacional. El idioma rumano es el coagulante entre todas ellas. El inglés, muy bien conocido por casi toda la juventud es el puente de unión con el resto del mundo (ojo al español, 500.000.000 de hablantes y creciendo no son pocos… pronto ya no será posible ser Presidente de Estados Unidos si el candidato no habla español)

Para llegar ahí hay que mejorar muchas cosas, y cito unas pocas:

a) Red terrestre: a penas existente con el resto del país. En condiciones malas y con un desarrollo muy lento.

b) Conexiones aéreas: El aeropuerto no sólo no gana sino que pierde desde que Carpatair está en suspensión de pagos y Austrian Airlines pasó a manos de Lufthansa. Tengo la esperanza de que el próximo traspaso de la gestión aeroportuaria al Consejo Provincial permita una acción más decidida sobre la política que las distintas líneas aéreas quieran imponer.

c) Conexiones ferroviarias: 10 horas para ir de Timisoara a Bucarest (600 Km). En teoría 9, pero casi siempre hay retrasos. Velocidad media 60 Km/hora. El primer tren español (Barcelona – Mataró) hizo en 1848 28 Km en 35 minutos, es decir, 48 Km/h. Queda bastante por mejorar.

d) El canal Bega, antaño navegable, símbolo de progreso industrial de esta ciudad y verdadera carretera de exportación de su producción industrial está cerrado desde hace decenios. Planes para reabrirlo muchos, realidades ninguna. Parece que en 1730, cuando se construyó por orden imperial, tenían las cosas más claras que ahora.

e) Calidad universitaria: ningún centro rumano figura entre los 500 mejores del mundohttp://www.shanghairanking.com/ARWU2013.html . Timisoara tiene buenos centros y prepara buenos profesionales, apreciado por las numerosas multinacionales que aquí se implantan, pero no es suficiente, debe hacer una importante restructuración. Comentario general de los estudiantes Erasmus: Aquí es todo es más fácil que en España. Tenemos un problema.

f) Política fiscal: La triste tendencia de (casi) todos los gobiernos de este mundo a aumentar la recaudación fiscal no debe implicar mayor presión sobre los cumplidores sino persecución de la evación fiscal, aún muy elevada. Bucarest debería reducir impuestos en todo el país y forzar la regularización de los que no pagan lo que deben. A este nivel, el anuncio del alcalde de Timisoara de que en su mandato no se aumentarán las tasas locales es un buen principio, esperemos que no se vea obligado a cambiar de opinión por un exceso de obras públicas y un excesivo crecimiento del endeudamiento. Evidentemente también hay que gastar menos o mejor, y en cosas que reporten riqueza y no votos cautivos. Lo mismo en todo el mundo, nada nuevo bajo el sol.

g) Impresión que la ciudad no está “Open for business”. Demasiadas complicaciones para iniciar algunas actividades económicas de gran calado, incluso renuncia por parte de algunas multinacionales a desarrollar sus proyectos, que finalmente se han ido a Arad (felizmente, y no a otro país), mucho más ágil según parece en cuanto se trata de atraer negocio.

h) Unir fuerzas con Arad. El futuro de una va ligado obligatoriamente al de la otra. Mientras que las dos ciudades, separadas por sólo 40 Km, quieran competir en cosas tan caras como aeropuertos, centros feriales y otros grandes proyectos de alto coste, perderán de vista el mundo real. Más ganarían en crear un tren rápido entre ambas que recorriera los 40 Km en no más de 15 minutos e hicieran de ambas un verdadero polo de crecimiento industrial. Si me permiten un nuevo juego de palabras: TIMISOARA + ARAD = TIMISOARAD. Me gusta como nombre… Creo que escribiré una entrada sobre las ventajas de este concepto.

i) Ciudad más agradable para vivir, sobre todo si queremos atraer occidentales acostumbrados a una mayor calidad de vida y otro tipo de filosofía urbana: mejor transporte público, carriles bici, limpieza, edificios restaurados, parques, centros de ocio y cultura, comercio… ¿Cómo se hace esto sin aumentar ni el endeudamiento ni la presión fiscal? Pues no lo sé, no conozco las cuentas del Ayuntamiento. El actual plan de remodelación del centro histórico es una muy buena idea que me alegra que se lleve a cabo. Esperemos que una vez terminado esté a la altura de las expectativas.

Hay muchas más, aunque ahora pongo estas pocas.

Acabo con otra ley de la física, la Ley de la Gravitación universal:La fuerza ejercida entre dos cuerpos de masas M1 y M2 separados una distancia R es proporcional al producto de sus masas e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia. Es decir, cuanto mayor es un cuerpo, mayor es su fuerza de atracción sobre otros y los acaba incorporando a su masa, con lo que aún crece más su poder de atracción.

Esto es lo mismo en las ciudades. Cuanto mayor sea su tamaño, sus posibilidades de encontrar buen trabajo, su oferta cívica y cultural, su calidad de vida, su fama, sus centros escolares y universitarios, su calidad sanitaria, su creatividad, el desarrollo de las nuevas tecnologías,… etc etc etc, más y mejor atracción tendrá sobre ciudadanos de otros pueblos o ciudades, cercanos o incluso bastante alejados.

El 53% de la población mundial vive en ciudades. Esto no se cumple en Rumanía, donde la población rural es aún muy numerosa. Cambiará sin duda, y muchos jóvenes irán a centros urbanos. Espero que Timisoara sepa aprovechar el potencial que tiene y no se duerma en los laureles. Tengamos en cuenta que vivimos en una modernidad líquida, según definió Zygmunt Bauman, y ahora todo fluye; si queremos tener en Timisoara la categoría futura de gran ciudad las bases tienen que ser muy sólidas y su poder de atracción, su núcleo, muy denso, para poder retener incluso algo tan escurridizo como un fluido. Sino otro lo hará.