El Consejo Provincial de Vasului aprobó la exploración de gas de esquisto en la comuna Bacesti, a unos 100 kilómetros de Barlad. El analista económico y exministro de Sanidad en 2003, Ionel Blanculescu, cree que no tiene ningún sentido hablar de sus riesgos después de que los Estados Unidos, Polonia y Reino Unido hayan empezado a explotar sin peligro el gas de esquisto.

"Rumanía tiene una dependencia del 40-50% del gas exterior. Si el 10% de esta importación fuera sustituida por el gas de esquisto de la producción interna, molestaremos a algunos empresarios y existirá el peligro de crear un precedente para otros Estados, por lo que las pérdidas serán mayores", explicó Blanculescu.

El especialista cree que será beneficiosa para Rumanía.

"Rumanía importa tres millones de metros cúbicos de gas por año, lo que cuesta un 1% del PIB, por lo que está claro que se abarataría nuestro gas", prosiguió Blanculescu.

El primer ministro rumano, Victor Ponta, apoya la explotación de gas de esquisto.