El Ejecutivo pretende aplicar un proyecto piloto para reducir el IVA en los alimentos básicos, empezando con el pan, aunque no se efectuaría en productos como el "Cozonac", declaró el lunes el primer ministro, Victor Ponta después de una reunión de la Coalición gubernamental Unión Social Liberal (USL), según Mediafax.

"Veremos si al final del año tendremos más facturas, más tasas pagadas o no", explicó

Ponta.

El jefe del Gabinete pregunta al Fondo Monetario Internacional si conoce alguna medida exitosa para ingresar más dinero.

Ponta señaló que se aplicará con el pan ya que existe una gran evasión fiscal y, sobre todo, consumido por los rumanos.

El IVA caería al 9 por ciento y se prevé un impacto de 150 millones de lei, unos 34 millones de euros.