El exdefensa y excapitán rumano del Barcelona, Gica Popescu, está considerando seriamente bajarse a los banquillos para dirigir a un equipo. Así lo aseguró al diario Gazeta Sporturilor, que publicó este martes un reportaje especial con motivo de su 50ª aniversario, en el que también habla de un momento genial con Johan Cruyff. “Quiero terminar la licencia PRO, ya tengo la licencia B. Veremos, podría aceptar una oferta. Por ahora, quiero tener los documentos en regula”, señaló.
El excapitán del conjunto azulgrana reconoció que su amigo y cuñado, Gica Hagi, conocido como el ‘Maradona’ rumano por su potente zurda, le ha pedido que se una a él en sus tareas futbolísticas. “Gica Hagi me ha dicho que me necesita en el fútbol, que es el momento de regresar y que la gente me quiere otra vez en el mundo del fútbol”, indicó Popescu.
Para sacarse la licencia de entrenador, el exinternacional rumano quiere hacerlo en España, puesto que la Federación española se lo permite a los exjugadores en tan sólo un mes. “(Pep) Guardiola, Luis Enrique, (Julen) Lopetegui pudieron obtener la Licencia PRO en 30 días. Se las aprobó la UEFA”, prosiguió .
En la entrevista, Popescu mencionó al legendario entrenador del Barcelona, el holandés Johan Cruyff. “Una vez, jugábamos las semifinales de la Copa UEFA contra el Bayern Munchen y no tenía ningún defensa central. Nos llamó a mí, a Guardiola, que era centrocampista y a Ferrer, lateral derecho: ‘Los tres jugaréis de central hoy. Klinsmann y Papin son sus delanteros. Tenéis diez minutos, !decidid cómo jugáis!’ Tomó la taza de café y se marchó”, recordó.
“Dije que marcaría a Klinsmann, porque lo conocía del Tottenham. Guardiola dijo ‘no puedo marcar a nadie’, así que Papin quedó para Ferrer”, contó Popescu, subrayando que Cruyff fue "un visionario con un poder de convicción fantástico”.
