Ambos países de la Europa del este afrontan un duelo de titanes por la segunda plaza del grupo D, clasificatario para el Mundial de Brasil de 2014.

Victor PiturcaFoto: HotNews / DP

El encuentro se disputará sin público en el estadio Ferenc Puskás de la capital húngara, en cumplimiento de la sanción impuesta por la FIFA al combinado magiar por los insultos antisemitas que un grupo de ultras profirió el pasado agosto en un amistoso contra Israel, señaló el diariovasco.com, que cita a la agencia EFE.

El seleccionador húngaro, Sándor Egervári, ha destacado que el choque es "sumamente importante", ya que los dos equipos están empatados a nueve puntos y son rivales directos por la segunda plaza, por lo que una victoria equivaldría a ganar "seis puntos". La segunda posición del grupo da derecho a jugar la repesca y ganar un billete para la máxima competición futbolística del mundo.

El equipo local podría recuperar para este partido a József Varga, centrocampista del conjunto alemán Greuther Fürth y una de las piezas clave de la selección húngara. Rumanía, por su parte, podrá contar con uno de sus principales atacantes, Adrian Mutu, recuperado ya de la lesión que le ha mantenido apartado de los campos durante tres semanas.

El atacante del club francés Ajaccio estará acompañado por el extremo del Granada Gabriel Torje, así como de Gheorghe Grozav, del Petrolul rumano, y Bodgan Stancu, del Orduspor turco.

"Quien gane tendrá serias opciones de ocupar la segunda plaza. Nosotros tenemos una pequeña ventaja puesto que nos impusimos a Turquía y tenemos el partido de vuelta ante Hungría", señaló el seleccionador rumano, Victor Piturca.

"Los húngaros son muy peligrosos. El hecho de que se dejaran dominar por los turcos y, después, se recuperaran ganando por 3-1 habla por sí solo", explicó el seleccionador rumano, quien detalló que su rival "se defiende bien y crea oportunidades cuando mantienen la posesión del balón".