El Instituto Cultural Rumano de Madrid (ICR) respondió este miércoles al presidente de este centro, Andrei Marga, por pedir el cese de la directora de la institución de la capital española, Ioana Anghel, al alegar una actividad "insatisfecha". El ICR de Madrid lamentó el trato recibido por el político de centroizquierda y por la falta de transparencia en los exámenes de evaluación.

Andrei Marga, presedintele Institutului Cultural RomanFoto: PNL

Comunicado de prensa relativo a las afirmaciones del presidente del ICR, Andrei Marga:

El ICR Madrid manifiesta que la institución diplomática de la capital del Reino de España a cuyo frente están la directora Ioana Anghel y la directora adjunta Luminiţa Marcu, se encuentra en situación de responder a las preguntas de la prensa, tanto de Rumanía como de España, referentes a las afirmaciones del presidente del ICR, Andrei Marga, según las cuales declara que:

“Cada año se lleva a cabo una evaluación de los institutos culturales rumanos del exterior, una evaluación a partir de los criterios establecidos por la ley y por una decisión gubernamental que data del año 2004.

Existe una comisión de evaluación compuesta por representantes del MAE (Ministerio de Asuntos Exteriores) y del ICR que ha tomado la siguiente decisión / cuyo resultado ha sido: los institutos de Istanbul y Madrid han obtenido un resultado insatisfactorio / desarrollan una actividad insatisfactoria, lo que significa que no han conseguido los objetivos previstos por la ley. En consecuencia, el ICR tiene que proponer el cese en sus funciones de sus directores y directores adjuntos”.

Y que:

“La principal razón resulta de comparar el informe de actividad presentado por los directores de los dos institutos de acuerdo con lo previsto por la ley. Se ha llevado a cabo el análisis por la comisión correspondiente, pero si tengo que ser más preciso entonces mencionaría dos cosas: hay muchas acciones, pero son pequeñas, que no crean algo perdurable, el objetivo de nuestro instituto, la visibilidad y el prestigio de la cultura rumana. El segundo motivo es que la interacción de estos institutos con el medio cultural local de sus capitales es modesta. No se ha podido introducir en esferas culturales más elevadas, en círculos universitarios, científicos, en las instituciones culturales de estos países.”

Hemos citado estas frases extraídas del comunicado de la agencia Agerpres, retomado posteriormente por otros organismos de prensa, puesto que no hemos recibido ningún tipo de declaración oficial por parte del presidente del ICR, con quien, por otro lado, la dirección del ICR Madrid no ha tenido ningún tipo de comunicación, ni verbal, ni escrita, durante los diez meses desde que Andrei Marga asumió la presidencia. Para no crear ningún tipo de confusión, queremos subrayar que: el ICR de Madrid no ha tenido ningún tipo de intercambio de carácter institucional con el actual presidente del ICR desde que asumió su cargo, ni que no ha manifestado ningún tipo de interés ni por la actividad del ICR de Madrid ni por las personas que estaban a cargo de su dirección, ni tan siquiera como expresión mínima de educación, que no ha visitado el ICR Madrid y no ha tenido ningún tipo de consideración, enmienda o comentario relativo a nuestra actividad en los últimos meses.

En lo referente al calificativo de insatisfactorio, queremos precisar que tal información se recibió el pasado 11 de abril de 2013 sin ir acompañada de explicación alguna, ni de los criterios de evaluación ni de los miembros de la comisión. Hemos considerado que esta calificación no refleja bajo ninguna forma la actividad del ICR de Madrid, actividad documentada en numerosos informes oficiales y artículos de prensa, por lo que en consecuencia hemos presentado un recurso contra el Ministerio de Asuntos Exteriores y la dirección del ICR, recurso del que en estos momentos esperamos respuesta. Nos sorprende la declaración del presidente del ICR en relación a un documento interno del ICR y del MAE, documento que se encuentra todavía en fase de debate. Igualmente, nos sorprende el hecho de que, estando el problema del calificativo y del recurso todavía sin solucionar, el presidente del ICR, Andrei Marga, haya emprendido el proceso de revocación.

En cuanto a las afirmaciones difamatorias del presidente del ICR Andrei Marga relativas a la calidad de la actividad del ICR de Madrid, queremos precisar que todos los proyectos de ICR Madrid se encuentran publicados en el web del instituto, así como las consideraciones de la prensa, y se pueden consultar en cualquier momento.

Resumiendo: el ICR de Madrid ha sido la primera institución que ha representado Rumanía en calidad de país invitado en una feria del libro (LIBER 2011, de Madrid) y que ha contribuído igualmente a un número récord de traducciones de literatura rumana al español, siendo España el país europeo con más títulos rumanos publicados (más de 50 en los últimos años). En Madrid, desde hace 3 años se organiza La Muestra de Cine Rumano, festival considerado por el periódico „El País” como el más importante de Madrid; también, el ICR de Madrid ha registrado en los últimos años la mayor cantidad de estudiantes de lengua rumana (un promedio de 120 por año), y durante el mes de julio del año pasado, antes de que Andrei Marga asumiera la presidencia del ICR, se abrió la primera biblioteca profesionalmente catalogada de libros rumanos en España incluída en la red del sistema bibliotecario de instituciones culturales rumanas en el extranjero, una biblioteca dotada con un catálago on-line y cuyo fondo puede ser consultado por especialistas de todo el mundo. Rumanía también fue el país invitado en el festival de cine de Barcelona y de Santiago de Compostela, en ferias del libro como la de Zaragoza o Bilbao, y participó en los últimos tres años en el festival más importante de fotografía de Europa, PhotoEspaña. En el año 2012, la directora del ICR de Madrid fue presidenta de la red EUNIC España, coordinando proyectos en los que participaron más de 20 embajadas e instituciones culturales, y representaciones de la Unión Europea en España. En cuanto a la relación con las universidades, el ICR de Madrid ha llevado a cabo numerosos proyectos académicos conjuntamente con importantes universidades de España ( Granada, Carlos III de Madrid, Alicante, Santiago de Compostela) y especialmente con la mayor institución universitaria como es la Universidad Complutense de Madrid. El ICR de Madrid ha colaborado también con importantes instituciones culturales españolas (la Biblioteca Nacional de España, la Filmoteca española, los gobiernos autónomos de Madrid, Cataluña, Aragón, Valencia y Euskadi, los festivales de cine de San Sebastián, Gijón, Santiago de Compostela, la Fundación CaixaForum, la Fundación Lázaro Galdiano, MUSAC, el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona), y se ha honorado con la presencia de importantes personalidades culturales españolas en sus eventos, entre los cuales el escritor Antonio Muñoz Molina, el filósofo Fernando Savater, el músico Jordi Savall, el escritor Fernando Iwasaki, el crítico de cine Roberto Cueto.

Durante estos días, por ejemplo, el ICR de Madrid participa en la feria más importante de venta de libros de España, que se inauguró el pasado viernes 31 de mayo, en cuyo estand la Reina de España se detuvo valorando la presencia de libros rumanos en la feria. Queremos precisar que la actual dirección del ICR de Madrid obtuvo por pirmera vez un estand propio en este prestigioso certamen de libros, en mayo del año 2012. Asimismo, en este mismo momento, se está llevando a cabo la gira de un teatro para niños por ocho ciudades importantes (Barcelona, Madrid, Valencia, Zaragoza, Castellón de la Plana, Alicante y Salamanca), proyecto dirigido a los niños rumanos que viven en España, en colaboración con una extensa cantidad de asociaciones de rumanos y con las representaciones consulares de Rumanía.

Queremos precisar que tanto la directora como la directora adjunta se encuentran en los últimos meses de su mandato legal y que este escándalo, generado por el actual presidente del ICR, Andrei Marga, no hace sino perjudicar la imagen de Rumanía y de la cultura rumana en España y en ningún caso perjudicar los intereses personales de unos funcionarios del estado rumano que se encuentran en una posición oficial de un modo temporal.

Entendemos, también del comunicado de prensa, y sin haber recibido ninguna notificación oficial en este sentido, que en estos momentos la Comisión de Cultura del Senado de Rumanía analiza, a propuesta del presidente del ICR, Andrei Marga, la revocación en sus funciones de la dirección del ICR de Madrid. Hasta el momento en que los senadores de Rumanía se pronuncien sobre este caso, queremos precisar una vez más que, indistintamente del resultado de esta decisión, las declaraciones y el comportamiento público del presidente del ICR, Andrei Marga, son de naturaleza tal que perjudican la imagen de la diplomacia rumana y de una institución que nos representa, desde el punto de vista cultural, a nivel europeo e internacional.

La dirección del ICR Madrid