​La Fiscalía anticorrupción de Rumanía acusó hoy al ex primer ministro Victor Ponta de un nuevo caso de corrupción vinculado al financiamiento de la campaña electoral que lo llevó al poder en 2012. Ponta, de 43 años, está bajo sospecha de haber pedido a un empresario rumano que cubriera los gasos de la visita a Bucarest de una “personalidad política extranjera” a cambio de un escaño de diputado.

Victor PontaFoto: Hotnews

Según el empresario, que habría desembolsado 220.000 euros para este fin, se trataría del antiguo primer ministro británico Tony Blair.

“El objetivo de Ponta pasaba por aprovechar la mediatización de esta visita para ganar rédito electoral”, señaló la Fiscalía en un comunicado de prensa.

La instancia judicial asegura que se firmaron dos contratos con una organización no gubernamental para “hacer creer que esta visita se hacía mediante una iniciativa de la personalidad extranjera” y no del propio ex jefe del Ejecutivo.

La Fiscalía indicó que “este mecanismo” está prohibido por la ley sobre financiamiento de los partidos políticos y añadió que el empresario consiguió su escaño como diputado en las pasadas elecciones generales.

Ponta no podrá abandonar Rumanía sin informar a los fiscales ni ponerse en contacto con las personas investigadas en el caso, subrayó la instancia judicial.

El ex primer ministro de centro izquierda ya está siendo juzgado por blanqueo de dinero y evasión fiscal en una asunto de corrupción que se remonta a cuando aún ejercía como abogado.

Ponta dimitió en noviembre del pasado año tras la presión de los ciudadanos por el trágico incendio de una discoteca en Bucarest, que causó 64 muertos, a causa de irregularidades en las normas de seguridad.