​Moscú lamenta que Rumania intente discutir en el Consejo de Europa el asunto sobre la devolución de 93,4 toneladas de oro que fueron sacadas de ese país a Rusia en los años de la Primera Guerra Mundial, y la exhorta a no “remover el pasado”, señaló el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Alexander Lukashevich, informó este jueves la agencia de prensa rusa, Ria Novosti.

“Lamentamos que para este tipo de asuntos tenga que requerirse del Consejo de Europa, una organización que goza de gran autoridad y que está destinada a contribuir a la formación de un espacio humanitario único en nuestro continente basado en un enfoque imparcial de la historia entre los países europeos”, indicó hoy el portavoz de la cancillería rusa Alexander Lukashevich.

Añadió que en el actual diálogo político entre Moscú y Bucarest el tema del “oro rumano” no existe.

“Consideramos que los intentos de remover el pasado en las condiciones actuales son contraproducentes y pueden generar situaciones indeseables, distraer la atención de temas concretos de actualidad concernientes a las relaciones bilaterales entre ambos países, que requieren de solución y que son muchos”, aclaró Lukashevich.

Asimismo, destacó que no es la primera vez que los parlamentarios intentan internacionalizar ese asunto que hace mucho tiempo dejó de ser actual.

En la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (APCE) se debate un amplio informe para revisar las obligaciones de Rusia ante el Consejo de Europa. En el documento figura la enmienda: singular demanda de “devolución de tesoros que fueron sacados temporalmente de Rumania a Moscú en tiempos de la Primera Guerra Mundial”.

La APCE considera que la devolución puede iniciarse a partir de la entrega de las reservas de oro del Banco Nacional de Rumania que asciende a 93,4 toneladas de oro en monedas y lingotes, cuyo listado completo y documentación fueron entregados nuevamente por Rumania a Rusia en 2004.